No cargues el mundo sobre tus hombros

No me gustaría tener la molestia de preocuparme cada día por la factura. 

Esta factura no es monetaria pero se siente aproximadamente lo mismo que cuando recibes una factura con muchos dígitos los cuales sabes que qui´zas no podrás pagar inmediatamente, que quizás debas pedir prestamos a los bancos, a alguna amiga, algún amigo, algún familiar, tirarte tus ahorros, buscar un trabajo de jornada doble, reducir tu porción de alimento diaria, ir al trabajo caminando, o tomar leche por las mañanas, vender tus propiedades, preparar chups para vender, llamar a tus padres y pedirles una ayuda, pedir un aumento... o hasta quizás ni te interese pagarlo y ya verás como haces luego...

Pero hay una gran diferencia con la factura "interna", la no monetaria: Que quizás jamás la puedas pagar por más que hagas sacrificios, porque implicaría retroceder el tiempo lo cual no se puede, lo único que se puede es recordarla a diario sabiendo que hay algo que debes pagar con tu vida por pedazitos, poco a poco. Ojalá sea buena la factura y me cobre de golpe de aquí a muchos años y pueda sacarla de mi mente a diario.


Comentarios